David Cristóbal Sánchez
Todo estaba listo, la radio estaba sonando en los oídos atentos de la audiencia, se sentía un ambiente de alegría, poco a poco se iban acercando las personas al lugar de costumbre, para recibir y dar comienzo al acto solemne de la fiesta y el recibimiento de bandas filarmónicas en la fiesta comunitaria de la comunidad de Jaltepec de Candayoc.
De repente se sintió un aire fresco que mareó al polvo de la carretera y se elevaron como si quisieran observar la fiesta desde lo alto, al voltear la mirada hacia arriba las nubes se retorcían con gran alegría, parecían estar bailando al son de la banda que ya venía en camino. Después de un rato las nubes dejaron caer sus gotas de agua, para refrescar la fiesta y también marcar el inicio de la celebración.
La electricidad no se quedó atrás, quiso irse a bailar con las nubes, por eso nos quedamos sin ella durante unas horas, pero no fue impedimento para que continuara la recepción de bandas, el equipo de la radio se las ingenió para tener las entrevistas de los directores de las cuatro bandas visitantes que una a una fueron llegando a su guarida de comunalidad, donde las personas de Jaltepec les dieron la más cordial bienvenida.
Primero arribó la banda de Santa María Matamoros, con todo el entusiasmo del mundo para deleitar con sus melodías en esta fiesta de Jaltepec 2015, trayendo consigo a muchos jóvenes integrantes de esta banda. Se hizo el intercambio de velas y se dirigieron algunas palabras de agradecimiento por estar presente en esta fiesta comunitaria, la cual es para hacer comunidad y seguir con las tradiciones ancestrales. El instituto Superior Intercultural Ayuuk fue la encargada de obsequiarles un presente a cada integrante de dicha banda.
Después siguió la banda de Otzolotepec la cual con sus palabras de bienvenidas y dianas se prosiguió a bailar los sones tradicionales de esta región, no había edad para estar bailando porque así es Jaltepec, sus gentes demuestran entusiasmo por revivir sus costumbres y no perder esta rica cultura.
La banda visitante de San José de las Flores, comunidad vecina de Jaltepec, fue la siguiente banda en arribar, la comunidad agradece su compartencia musical ya que en los últimos años se ha presentado como invitado que deleitó con sus mejores melodías.
San Antonio Tutla fue la última banda en llegar, se escucharon los cohetes que dan aviso a la madre tierra y a los pobladores que la fiesta está empezando, “para que nos podamos acompañar ya que todos somos uno”, era la señal que la fiesta apenas estaba empezando y la música jamás debe faltar en esta fiesta.
Los cohetones retumbaban el cielo y el viento arrullaba los corazones, a través de los sonidos que emitían las bandas cuando se dirigían a la casa del mayordomo, lo anterior para comenzar con la tradicional calenda rumbo al centro de la población que fue de lo mejor.
El espíritu del baile salió a luz y puso a bailar a todo Jaltepec. Se acompañó con la regada de frutas, que entre risas, unos tragos de mezcal y sobre todo olor a alegría y fiesta se nos amaneció, para juntos cantar las mañanitas al santo patrono.
